'Revólver', mareante ensalada mental

'Revólver', mareante ensalada mental
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¿Qué decir de una película que me ha parecido una completa pérdida de tiempo? ¿Qué sacar en limpio de un film penosamente narrado, incomprensible en muchos de sus puntos y que demuestra una total falta de ideas por parte de su director? Cuando uno ha visto un número considerable de películas (más de las que mi retorcida mente recuerda) ya está acostumbrado a tragarse bodrios infumables, pensando que peor no se puede hacer. Recientemente, creía que la cota más baja jamás alcanzada por una película era ‘The Spirit’, ese atentado a la inmortal obra de Will Eisner.

Pero ahora, y aprovechando el supuesto tirón comercial de ‘RocknRolla’ y ‘Transporter 3’, nos llega ‘Revólver’, el antepenúltimo trabajo de Guy Ritchie tras las cámaras, en una época en la que no gozaba precisamente de buena prensa. Muchos achacan esa falta de ideas y buen hacer a haber estado por aquel entonces con Madonna, una de las artistas más inteligentes que han existido dentro del mundo de la música, pero que no debería asomar sus narices al séptimo arte, ni de lejos.

Me parece muy cogido por los pelos el echarle la culpa a otra persona por la posible influencia que ha podido tener sobre otra cuando estaban juntos. Lo que sí es cierto es que Ritchie estaba muy en baja forma en esos años, y ‘Revólver’ es una clara muestra de ello. Personalmente no me parece un gran director, ni siquiera bueno. Me divierto lo justo con películas como ‘Lock & Stock’ o ‘Snatch’, y en el caso de esta última es por poseer un personaje tan bien dibujado y caracterizado como el que interpreta Brad Pitt, en una de las apuestas más arriesgadas de su carrera. De ‘RocknRolla’ ya sabéis lo que pienso, y ‘Barridos por la marea’ no entra de momento en mis intenciones para el resto de mi vida.

Me acerqué a ‘Revólver’ con la esperanza de al menos pasar un rato entretenido, sin más. Ver a un Ritchie totalmente desbocado, y entre comillas, entretenido. Además, el reparto, como todos los repartos en el cine de Ritchie cumple mínimamente unas expectativas: Jason Statham, que cuando quiere es muy carismático, Ray Liotta y Mark Strong. Al final me encuentro con una historia excesiva, unos actores inadecuados, y unos resultados realmente pésimos. Contar de qué va ‘Revólver’ es una tarea harto difícil, e incluso dañina para la salud. Un recién salido de la cárcel, que se supone tiene todo el dinero del mundo, conseguido gracias a poseer la fórmula perfecta para ganar en todos los casinos del mundo, se topará de narices con dos misteriosos individuos que le han salvado la vida y para los que termina trabajando a cambio de unas curiosas y nada agradables condiciones.

Cójase algo de cine de gangsters, algo de cine de juegos (sí, ya sé que ese género no existe, pero ya sabéis lo que quiero decir), algo de comedia loca, algo de drama, algo de acción, algo de suspense, mézclese en un cocktail en el que ya había restos de otras cosas, y el resultado será más o menos, ‘Revólver’. El problema es que la mezcla está tan mal realizada, la película es totalmente inclasificable, y le ha pasado lo que le suele pasar a todas las películas inclasificables: ha sido un estruendoso fracaso. Los distribuidores no han sabido cómo vender una película de estas características, ni aún viniendo firmada por Ritchie, quien goza del favor popular, y han tenido que esperar a que se estrenara ‘RocknRolla’ para estrenarla en nuestro país, en vez de hacerlo cuando había que hacerlo, en el 2005 (apuntemos que en los USA se estrenó de forma limitada a finales del 2007, casi nada).

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La puesta en escena de Ritchie es totalmente confusa y mareante, sobre todo por intentar montar una historia que no tiene ni pies ni cabeza, y que revive en nuestra memoria el recuerdo de dos films de los 90 muy famosos, los cuales, si se citan, se destriparán por completo las intenciones del director, si es que éstas han existido alguna vez. Aún así, y por lo lamentable que me ha parecido ‘Revólver’, voy a dar dos pistas bien claras: Bryan Singer y David Fincher. El primero aún no tiene la suficiente personalidad como para considerarle un buen autor, y el segundo le lleva de ventaja unos cuantos años luz al primero, aún teniendo más o menos el mismo número de films en su filmografía. En cualquier caso, Ritchie se queda muy, pero que muy por debajo de ambos, y querer inspirarse en ellos, o en parte de sus obras, le ha quedado muy grande. El director de ‘Snatch’ se pierde en trascendentalismos de guardería, y en un aire pseudo-místico, con el que intenta diferenciar su film de otros. Aplicar estos elementos a su cine, en el contexto de una historia de gangsters, salpicando de suntuoso misterio cada uno de sus planos, termina por resultar muy cargante, sobre todo a partir de sus segunda mitad, cuando los hechos se aceleran y amontonan.

Jason Statham nunca ha estado peor, y eso que su participación en películas malas es considerable; Ray Liotta probablemente echa de menos sus tiempos de ‘Uno de los nuestros’, y aunque aquí protagoniza el momento más interesante del film (el tiroteo en un restaurante), está más pasado de rosca que nunca; y Mark Strong da vida a un interesante personaje (con resquicios de alguna película de Jean-Pierre Melville que me niego a citar, y también algo de Luc Besson, en vano, uno de los escritores del film). En un breve pero importante papel podemos ver a Vincent Pastore (personaje vital en la serie televisiva ‘Los Soprano’, de la cual servidor se acaba de zampar la segunda temporada, y de momento me da más satisfacciones que el cine actual, y es que la HBO es lo más).

No me atrevería a decir si quiera que ‘Revólver’ es un film que satisfará a los fans más fanáticos de Guy Ritchie, aunque supongo que alguno habrá. Para mí es una de las cintas más pedantemente insufribles (curioso utilizar estos términos en el cine de este director, jamás lo hubiera pensado) que he tenido la desgracia de ver. Aburrida, incoherente, excesiva, molesta, agobiante, absurda, disparatada, confusa, embrollada, sobrada, y muchas cosas más. Por cierto, que levante la mano aquél que la ha entendido. Servidor, como tiene la mente más simple que un botijo, no lo ha hecho. Pero eso no es excusa para que sea buena o mala, que no es ninguna de las dos cosas. Utilizar cualquiera de los dos adjetivos sería ser muy generoso, y eso tampoco lo soy.

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