'Jurassic World', diversión sin rastro de brillantez

'Jurassic World', diversión sin rastro de brillantez

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'Jurassic World', diversión sin rastro de brillantez

'Parque Jurásico' (Jurassic Park) es una de las películas fundamentales del cine americano de los 90, un gran entretenimiento que marcó la infancia de millones de niños a lo largo de todo el planeta y que aún hoy sigue funcionando de maravilla. Por desgracia, Steven Spielberg no estuvo a la altura con la fallida 'El mundo perdido: Jurassic Park' (The Lost World: Jurassic Park) y la saga tocó fondo en 2001 de la mano de Joe Johnston con la endeble tercera entrega.

Sin embargo, Universal ya empezó a trabajar en la idea de una cuarta parte antes incluso de que 'Parque Jurásico III' (Jurassic Park III), llegando a sopesar premisas absolutamente disparatadas antes de la contratación de Rick Jaffa y Amanda Silver en 2012 para escribirla. El proyecto fue avanzando y hoy llega a los cines 'Jurassic World', una entretenida secuela muy respetuosa -quizá hasta demasiado- con el original de Steven Spielberg cuyo mayor problema es que ofrece diversión “consistente”, pero sin llegar en ningún momento a deslumbrar al espectador.

'Jurassic World', entretenimiento garantizado

Escena de 'Jurassic World'

Seguro que hay muchos preguntándose cómo es posible que se permitiera abrir otro parque temático poblado por dinosaurios tras los hechos acontecidos en 'Parque Jurásico', ya que 'Jurassic World' no es un reboot e incluso llega a mencionar lo sucedido en la primera entrega, y no me cabe duda de que los que quieran sacar punta al guión de Jaffa, Silver, Mark Protosevich y Colin Trevorrow encontrarán muchos cosas que discutir en lo puramente argumental, empezando ya por el hecho de que el personaje de una correcta Bryce Dallas Howard se pase toda la película usando unos zapatos con tacones.

La cuestión es que 'Jurassic World' busca en todo momento ser un blockbuster divertido que no se toma en serio a sí mismo y que tampoco se preocupa mucho en proponer una auténtica reflexión sobre lo que nos cuenta. De hecho, tampoco hay especial interés en diferenciarse de 'Parque Jurásico', pues estamos ante una película que básicamente pone al día todo lo tratado por Spielberg en la primera entrega de la saga -a poco que uno piense en la historia y cómo evoluciona verá que las líneas maestras son las mismas-, aplicando la normalmente poco efectiva idea de que más es mejor.

Todo ello supone que Trevorrow prefiere no detenerse nunca demasiado en la historia para que la acción vaya hacia delante en todo momento, incluso cuando hay que introducir a un personaje como sucede en la primera aparición de un Chris Pratt muy efectivo que no cae en el error de que Owen sea una mera variante de su magnífico Starlord en 'Guardianes de la Galaxia' (Guardians of the Galaxy). El resultado es que 'Jurassic World' es ante todo una película de aventuras cuando la primera entrega lo combinaba con una importante carga de ciencia-ficción e incluso con unos muy logrados toques de terror.

Chris Pratt en 'Jurassic World'

Este “sacrificio” realizado por Trevorrow da pie a un ritmo más vivo y con una gran cantidad de set-pieces que cumplen perfectamente su cometido y nunca llegan a cansar al espectador, ya sea por estar mal ejecutadas o por no existir el suficiente espacio entre ellas. Lo malo es que Trevorrow no logra crear ninguna secuencia memorable que vaya a perdurar en nuestra cabeza mucho más allá de que abandonemos la sala, pues 'Jurassic World' ofrece diversión poco más que de usar y tirar y también carece de ese encanto especial que podría haberla elevado por encima de otros blockbusters.

Donde sí acierta 'Jurassic World' es en la utilización del humor, ya que la esparce a lo largo del relato en lugar de utilizarlo como un recurso constante, consiguiendo que la práctica totalidad de momentos cómicos funcionen a la perfección, en especial uno protagonizado por los personajes interpretados por Jake Johnson y Lauren Lapkus. Estas pequeñas dosis de ligereza le sientan muy bien a la película para evitar sobrecargas de situaciones emocionantes, algo que sólo se deja notar un poco durante su último acto en el que no dejé de acordarme del final de cierto episodio de 'Los Simpson' -ojo con pinchar en el enlace, que igual lo consideráis spoiler-.

Con poco que aportar

Los velociraptors

No seré yo el que discuta a aquellos que estén valorando a 'Jurassic World' como la mejor secuela hasta la fecha de 'Parque Jurásico', porque realmente lo es. Lo que ya no tengo tan claro es qué aporta realmente más allá de ver gastado en pantalla un dineral para recrear a unos dinosaurios que no siempre son mejores a la vista -y tienen mucho menos encanto- que los que ya vimos hace más de 20 años y en el hecho de que es un buen pasatiempo veraniego, algo que seguro que ya es más que suficiente para muchos.

Aparte del ya mencionado hecho de que no hay ninguna set-piece deslumbrante, el otro gran defecto, aunque no tengo del todo claro que haya que considerarlo como tal, es que su respeto al original de Spielberg se traduce en una marcada apuesta por el continuismo que afecta a la película en todos los niveles, desde la construcción de la historia y los personajes -en algunos casos es más evidente que en otros- hasta la banda sonora de Michael Giacchino. Pura diversión de diseño muy en la línea de los tiempos que corren, algo que no es necesariamente malo, pero sí decepcionante.

Estoy convencido de que todo se debe a un meditado intento de no enfurecer a los fans, pero lo que se consigue en este caso es que no tenga una verdadera personalidad y que salga perdiendo en todo en la comparación con 'Parque Jurásico', aunque sin llegar en ningún momento a ser algo sangrante -el personaje de Vincent D'Onofrio es el que sale peor parado y no llega a ser una molestia-. Lo que sí puede decirse es que Trevorrow ha fracasado en su intento de hacer una película que sienta como suya, ya que ese respeto o nostalgia mal entendida acaba siendo una losa demasiado pesada.

En definitiva, 'Jurassic World' es un buen entretenimiento veraniego y la mejor secuela de 'Parque Jurásico' hasta la fecha, pero también es una película que bebe demasiado de la primera entrega y que no llega a crear realmente nada por sí misma, ni siquiera alguna set-piece que nos deje con la boca abierta -las hay buenas, pero ninguna antológica-. Para unos será poco y para otros más que suficiente, ahí ya depende de cada uno lo que pueda disfrutar con ella, pero lo que sí tengo claro es que aquellos que no vayan de entrada predispuestos a sacarle pegas van a pasar un buen rato.

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