'Corazones Solitarios', sobrio cine negro sin genio

'Corazones Solitarios', sobrio cine negro sin genio
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En la crítica de 'Corazones Solitarios' que el ascensorista hace en su blog, cuenta la anécdota del músico al que le encantan como suenan los pianistas de jazz americanos, aplicándola al gusto por el cine americano, sobre todo cuando éste ahonda en sí mismo y nos devuelve una forma de hacer cine que pocas veces se ve, rindiendo culto a un género tan puramente americano como el cine negro, con sus sombras, sus humos y sus mujeres fatales. De una película como la presente, uno puede palpar ese gusto y respeto por ese viejo cine, y disfrutar de una narración solvente totalmente clásica, con personajes puramente clásicos.

La película narra las andanzas, basadas en hechos reales, de Martha Beck y Ray Fernández, una pareja de asesinos y estafadores que las hicieron pasar canutas a la sociedad norteamericana de los años 50. Una historia llevada dos veces con anterioridad al cine, y ahora Todd Robinson, que es nieto del policía que investigó el caso, nos ofrece su versión. Y le pone cariño, pero le falta la garra de un genio que le infiera alma a la película.

La película destaca por un pulso firme y conciso, logrando una cinta muy entretenida y llevadera. Si acaso habría que decir que el montaje paralelo de dos historias no está del todo conseguido, ya que ambas historias caminan demasiado separadas la una de la otra, a pesar de estar totalmente relacionadas. Pero es como si pertencieran a otras películas, hasta que, evidentemente, las dos líneas argumentales llegan a un punto de unión, en el que el film mejora bastante logrando cerrar la película de forma espléndida. Que exista ese distanciamiento, y también cierta previsibilidad, no impide que el film tenga un buen ritmo, no decayendo éste en ningún momento.

Mi compañera Beatriz en su crítica de la película, creo que menciona algo acerca de que el personaje de Salma Hayek pueda perder algo de credibilidad por no parecerse físicamente al personaje real, ya que Martha Beck era una inmensa gorda, y la Hayek pues ya se ve que no. En mi opinión, creo que es una de las más acertadas decisiones de la película, porque no hace falta recordar que esto es cine, caballeros, no un documental, y el hecho de que Hayek esté imponente físicamente hace más terrorífico el papel, y su patetismo es mucho mayor que ver las reacciones que este personaje tiene en el caso de que fuera obesa, ya que serían más evidentes. Me ha agradado enormemente la interpretación de Salma Hayek, siendo probablemente lo mejor de la película, alcanzando sus mejores momentos en el tramo final del film.

El resto del reparto se mueven en muy distintas direcciones. John Travolta (éste sí que engordó de narices) está francamente mal en su personaje, logrando incluso que el espectador desconecte un poco, a pesar de lo interesante de su papel, y además se le ve cansado y como mal a gusto en la piel del policía. Jared Leto está un poco histriónico, aunque hay cierta química con la Hayek. A Laura Dern apenas hay tiempo de saborearla, y James Gandolfini hace un personaje entrañable, actuando además de narrador de la historia, logrando emocionar en algún momento.

Una buena cinta de cine negro, resuelta con mucha maña y soltura, a pesar de los fallos mencionados. Es una pena que no esté teniendo repercusión, porque es preferible a una infinidad de títulos actuales que hay en cartelera y que obtiene un mayor reconocimiento. Al igual que el buen jazz, yo también prefiero que este tipo de cine sea americano. Sólo ellos saben hacerlo.

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